Historia
Casa Rural Cresolera es un proyecto que nace con el deseo de ofrecer a sus huéspedes un oasis en el desconectar del día a día que invite a encontrar la calma y recuperar la vitalidad.
La hemos rehabilitado totalmente manteniendo elementos y materiales originales de la construcción de finales del siglo XIX, como la piedra, el mortero y los techos abovedados con vigas de madera, combinados con un diseño moderno que juega con la orientación y entrada de luz natural generando un espacio diáfano y confortable.
El resultado es una casa con mucho encanto.
Ubicación y entorno
Casa Rural Cresolera se sitúa en el casco histórico de Villalonga, un pequeño pueblo rodeado de montañas y bañado por las aguas del río Serpis.
Situada en pleno Centro Histórico, goza del silencio y de la apreciada calma característica de una zona peatonal de un pueblo tranquilo que invita a pasear por sus calles y plazas para acercarse a contemplar sus curiosidades y conocer su historia.
A tan solo 15 km del mar y de las fabulosas playas de Gandía, Villalonga tiene a su alrededor naturaleza en estado puro: las majestuosas montañas del Circo de La Safor, el valle del Racó del Duc por el que discurre el río Serpis o la extensa llanura en lo alto de la montaña llamada La Llacuna.
Reconfortante descanso y agradable despertar en la estancia, te animan a realizar actividades que complementen la escapada y lograr una fabulosa experiencia.
Tu casa fuera de casa
Máximo 6 personas
Actividades y gastronomía
Desconexión
Un espacio respetuoso
Somos un espacio libre de alérgenos al que pueden venir personas con hipersensibilidad y/o alergias. Es por ello y con mucha pena, no admitimos mascotas.
Por respeto a todos los huéspedes y al Medio Ambiente, te pedimos que colabores con nosotros para que Casa Cresolera sea un “espacio sin humo” y aceptes que no está permitido fumar en cualquier estancia.
Debido a las características propias de la casa, lamentamos comunicar que no se encuentra adaptada o accesible a personas con discapacidad física o movilidad reducida. Sentimos las molestias.
